Nueve meses de espera es el tiempo que tiene una pareja para darse cuenta de que la Vida ha obrado un gran milagro.
Thais envuelve en su vientre la belleza de una nueva vida, la que aflora en sus ojos al pensar en el pequeño que está por llegar, que revoltoso, va creciendo día a día.
Diego mira a Thais y en su tierna mirada se esconde la Felicidad de sentir a su lado a la mujer de su vida, portadora de esperanza, portadora del futuro.
Ahora, juntos, los tres, emprenden un nuevo camino con un nuevo rumbo, en el que las noches sin dormir, se mezclan con sentimientos que renacen, con el deseo de un nuevo horizonte, con la certeza de que la Vida les ha concedido el mayor de los regalos: su hijo Diego.
Agradecimientos a Vanesa
y al