LA LUZ DEL FUTURO
Toda pareja encuentra en su propia esencia la parte del otro que le suma
Cuando conocí a Rosa y Salomón la ilusión de la nueva etapa vital en la que se encontraban me contagió al instante. Contar a través de mis imágnes «La Dulce Espera» de esta pareja ha sido recorrer junto a ellos un momento, un instante de su hermosa historia de Amor, ser cómplice de sus sonrisas y ser testigo de sus miradas.
Los ojos de Rosa desprenden el brillo del sentimiento más pleno, el amor más grande y el deseo de ser amada. Su belleza se multiplica al igual que lo hace la vida en su interior.
Salomón es un hombre sereno, una persona que habla con la mirada y transmite, desde su más pura esencia, el deseo de un futuro esperanzador.
Juntos, de la mano, ven cómo su Amor se expande, se vuelve más y más grande cada día y ahora, con la llegada del pequeño príncipe, descubren que la magia que nació un día entre ellos dos es tan real como lo es el momento tan especial que los envuelve ya.
Un nacimiento es el principio de todo, es el milagro del presente y la esperanza del futuro.
El futuro pertenece a quienes creen en la belleza de sus sueños
«El amor es como un barco con dos capitanes, que de la mano izan cada días las velas»
BIENVENIDO
Gracias a Verónica por el trato impecable en el Palacio Arizón y gracias a Esperanza Vital del Moral por su amabilidad siempre
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