DIVINA ANA

Un brindis por la vida

Desde días antes, Ana sentía esos nervios propios de quien está a punto de cruzar unos límites que creía insalvables y por otro lado, siente la fortaleza de quien quiere y tiene la determinación de cumplir un sueño. Ana caminaba hacia su Sesión Boudoir. El amanecer fue su primer regalo. Un trayecto no exento de adversidades le recordaron que, como en la vida, todo es cuestión de actitud. Después en Alarte, con Alejandra, sintió la magia de verse hermosa a través de un nuevo espejo. Y llegó el momento de conocernos tras meses de cuestiones, tareas y confidencias. El lugar elegido fue el Hotel ABBA Palacio de Arizón, en el que previamente todo había sido dispuesto para que siguiéramos engarzando los momentos tal y como la ocasión requería.

El primer brindis fue un recordatorio en voz alta de que todo estaba a punto de comenzar, y entre melodía y sintonía, la luz comenzó a jugar con el tiempo y Ana comenzó a dejarse llevar. Y fui testigo de cómo se produjo esa magia que conecta personas, esa magia que se llama Experiencia Boudoir, y que no solo anda quien comienza el camino, sino que también a su lado, siento mis huellas ahondar. He aprendido a admirar a esta mujer, a Ana, que desde lo más profundo de su ser se miró de frente en el espejo de la realidad y lo que vio, lo entendió, lo aceptó, lo admiró y lo amó. Porque Ana cumplió su sueño, rompió sus propios esquemas y comenzó de nuevo, descubrió que hay muchas Anas, las que recordaba, las que había olvidado, las que estaban y las que serán. Durante un día jugamos a estar, a olvidar el mundo tras las hermosas paredes de aquel palacio y la magia que se encuentra en las cosas que fluyen le devolvió a Ana aquel reflejo que siempre estuvo ahí.

Divina Ana

Ana es una mujer valiente, cuya mayor fortaleza se ha hecho visible en tiempos de inestabilidad. Una mujer que mira y ha mirado de frente a sus miedos y ha buscado la manera de enfrentarlos y superarlos y en esa cuerda tirada al vacío ha aprendido a volar. Al principio dando pequeños pasos, sin atreverse siquiera, a mirar atrás, porque eso hubiera supuesto arriesgarse a no arriesgarse; después notando el peso de su cuerpo, de su esencia sobre esa delgada cuerda, siendo consciente de que cualquier falta de determinación en esas alturas sería una caída al vacío; pero con la premisa certera de que a volar se aprende volando, Ana se hizo fuerte ante las dudas y resurgió valorando la osadía de vivir. Ana eres una mujer libre que ahora entiende la vida sin necesidad de aprobación, o al menos, saltando por encima de esa obligación impuesta y autoimpuesta de pedir opinión pública. Con las riendas apretadas y el rumbo claro. Dejandose guiar por la luz que siempre tuvo en su interior. Ana siempre ha sido Ana, sin embargo, ahora lo es más que nunca.

 

 

UN VIAJE MARAVILLOSO

Es impactante el sentimiento que te embarga cuando descubres que hay una esencia que dirige tu vida al margen de lo que dicte o se rumie en tu mente, cuando te preguntas cómo has materializado algo si en tu mente está lo contrario. Con el tiempo y con consciencia descubres que esta Esencia, este Ser, es quien habita en el maravilloso cuerpo que la Vida te regalo al nacer, en el interior, y que tu mente “simplemente” es la que dirige y se manifiesta mayoritariamente en tu vida haciéndole sombra, no dejándote ver. Esto es lo me ha pasado con mi Experiencia DIVINA, sin darme casi cuenta, había enviado un mensaje…

¿Por qué ahora? Tras todo el viaje estoy mucho más segura de la respuesta, aunque no ha cambiado desde el  primer día, desde que se la di a Irene cuando me lo pregunto: porque es MI MOMENTO. Un momento en mi vida de cambio, de búsqueda, de reflexión, de interior, de mirarme, de quererme, de fluir, de soltar. Tengo que reconocer que la idea de la fotografía siempre me había atraído y estaba en mi cabeza, me había hecho algunas e incluso había buscado en internet en varias ocasiones sin llegar a decidir nada. Y llegó el día en el que al buscar encontré a Irene y vi que lo que ella ofrecía no era solo Boudoir, no solo una sesión fotográfica, era todo un viaje interno y un trabajo de crecimiento, era la fotografía con un plus, envuelta en papel de REGALO…. y no lo dudé. Ya me encontraba en un momento de introspección y esto me lo iba a poner más fácil todavía, ¿o difícil…? ¡Qué ingenua!… ¿fácil?….

Decidí hacerlo en secreto, no pedir “autorizaciones”, ni “conformidades” o “aprobaciones”. Hacerlo yo sola, superar ese primer escalón de no “necesitar” el apoyo o el ánimo de alguien, quitarme el  miedo a desaprobaciones, a pegas, a juicios. Conforme todo avanzaba me di cuenta de que lo que quise comenzar como un regalo para alguien, se tornó en un AUTO-REGALO solo para mí, era mi interior, era mi exterior, era mi alma, era yo, solo YO y sin juzgar, quitemos la “z” y vamos a jugar.

No podría decidir que etapa me ha gustado más, el viaje interior me ha dado la oportunidad de volver a conocerme, volver a ver que hay dentro, que quiero, que deseo, y, creo que lo más importante, porqué lo había abandonado. No fue nada fácil, hay muchas ocasiones en la que mirarnos y vernos, encontrarnos, es doloroso. El viaje divertido me hizo ver a la niña ya crecida, ver cuántas diferencias y cuántas similitudes hay en la vida de la infancia y la que nos ”imponemos” cuando crecemos y empezamos a formar parte de esta sociedad estructurada, que te marca, que te segmenta, que te encasilla. El viaje exterior ha sido una búsqueda de sensibilidad, de impacto, de “esto quiero en mi”, y me ha ayudado a quitarme miedos y vergüenzas tan, tan, tan identificados…..¡qué bien me sentí haciéndolo! Y cuántos nervios preparando maletas y cosas a hurtadillas, escondida de todos para seguir manteniendo mi secreto.

Y poco a poco llega el día que tanto anhelas, la sesión DIVINA… son tantos los sentimientos que me cuesta encontrar palabras para que quepan todos. Ese día todo estalla, se desata, es incontrolable, no identificas bien cuál es la fuerza que te empuja a ser tan poderosa, tan indestructible. Es sentir: “Mundo, apártate que voy YO”. Vas a ciegas, pero con una confianza que pocas veces antes has experimentado. Llegas a un lugar donde te transmiten belleza, por dentro y por fuera, no es solo energía, vibración, es también físico, te entregan amor, sacan lo mejor de ti dándote lo mejor de ellas, todo de una manera sublime, y ya sientes que no hay nada que pueda contigo, que estás preparada para todo. Cuando finalmente llegas al lugar de la sesión es cuando se realiza la verdadera CONEXIÓN. Nunca había visto a Irene, no la conocía, sin embargo el abrazo de bienvenida era el de una amiga de toda la vida, de esas que hay pocas, de las que siempre están ahí. Luego te das cuenta de que sí que te conoce, yo diría que mejor que tu misma antes de iniciar el viaje; te has abierto en canal a ella preparando este día:  ¡¿cómo no va a conocerte?! Esto es lo que hace que sea “fácil”, que tu nivel de inseguridad, reparo o vergüenza, estén por los suelos o directamente desaparezcan, que te abras, que conectes, que disfrutes, que rías, que llores, que bailes, que abraces, que saltes, que SIENTAS, que pases uno de los mejores días de tu Vida.

Una de mis reflexiones era: ¿y luego qué? Luego se manifiesta la energía, la positividad, el empoderamiento, la adrenalina, la satisfacción personal de TODO lo que has hecho, lo que has conseguido, lo que has superado, lo que has aprendido, lo que has descubierto, lo que has experimentado, ¡qué sensaciones más MARAVILLOSAS!!! El nerviosismo y la impaciencia entran al juego más aún si cabe, la espera se hace larga, sin embargo el resultado, como no podía ser de otra manera, es ESPECTACULAR.

Cuando poco a poco vas descubriendo el gran trabajo de Irene todo se magnifica, las sensaciones que ya habías experimentado se intensifican y se mezclan con otra sensación nueva de una especie de ilusión, de sorpresa, de incredulidad, de alegría, y esto se siente día tras día ¡Que hermoso!

Gracias Irene por ser TÚ, por darte, por estar siempre, por ayudarme a redescubrirme, por ahondar, por meter el dedo en la llaga, por hacerlo fácil y difícil, por hacerme crecer, por llevarme de la mano, por creer en mí, por mirar como miras, por ver lo que ves, por tu profesionalidad, por tu generosidad, por cómo lo haces y cómo lo vives. Sin duda eres el ALMA de todo este trabajo, sin ti no sería posible.

Vivir esta experiencia me ha hecho sentir más Mujer aún si cabe, me había olvidado, descuidado, relegado a un lugar oscuro, apagado. Me he sentido despierta, vital,..…VIVA. Solo me queda dar las GRACIAS a TODO por ayudarme a cumplir uno de mis sueños.

Ana Tomares

Sevilla- Febrero 2022

separador+En el Hotel ABBA Palacio de Arizón – Sanlúcar de Barrameda(Cádiz)

Un lugar lleno de magia gracias a quienes lo hacen especial: Verónica Villegas Bernal y su equipo. Gracias Vero, Espe y Laura. Maravillosas

Logo-alarte-900Maquillaje y Peluquería: Alejandra Sánchez y su equipazo de lujo: Paloma y Mª Regla.

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Estilistas de vestuario: Caridad Galán y Alejandra Díaz de Style Kokoro. Gracias siempre.

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