La Aventura de casarse encuentra en el camino hermosos e increíbles episodios que la convierten en inolvidable.
Volver a vivir el ayer, con los pasos del presente, diez años después, convirtió la preboda de Mila y Dani en todo un acontecimiento.
El Hotel Macià Plaza, en el corazón de Granada, en la arteria principal de la ciudad que nunca duerme, era el enclave ideal para esta aventura sin igual.
Y así, sus pasos encontraron sobre la Colina Roja, la ciudadela de la Alhambra: orgullosa y eterna. El jardín musulmán del Generalife, alejado de las preocupaciones de la corte,  consiguió que Mila y Dani se olvidaran del mundo, dando rienda suelta a sus sentidos como hace más de ocho siglos. Este tesoro de la historia, dentro de la propia ciudad de Granada acogió el deambular conquistador de quienes poseen un mismo sentir.
Y después Mila y Dani se perdieron por las calles de la Alcaicería, y sus risas resonaban en cada rincón y las luces de colores dieron paso a la noche granadina, bulliciosa y revoltosa.
Al día siguiente, el Granada Five Sense convirtió momentos de intimidad en recuerdos imborrables, al amparo de un sol orgulloso, que entrometido, escuchaba las confidencias de dos enamorados, cuyos deseos se convirtieron en realidad, llegando, al final del camino, a contemplar la bella Granada desde el Albaicín.

Granada, el despertar de los sentidos, un viaje para recordar más allá del tiempo. Gracias pareja por Todo.

 

 Hoteles MACIÀ: Hotel Macià Plaza y Granada Five Sense

Gracias a Mª José de La Alhambra por su gentileza.
Gracias a mi compañera María Juan de la Cruz por ser mi cicerone particular.
Gracias a Salud de Atlántico Viajes por su profesionalidad y por su amistad.
Gracias a Raul Carrillo por su amabilidad y a Yolanda por su eficiencia y su trato.
Gracias a Artealia Granada.