«El alma que puede hablar con los ojos, también puede besar con la mirada»
Hipnótica, así es su mirada, así es su personalidad. Así es Verónica
Nos conocimos un calurosa tarde de agosto, con carreras de caballo como telón de fondo y compromisos familiares a dos bandas. Aquel primer encuentro fue tan especial, como las cosas que solo suceden por casualidad, y durante unas horas el tiempo se detuvo y en vez de dos desconocidas compartimos pensamientos como si nos conocieramos de toda la vida.
Después el deseo de Antonio, su marido, convirtió un sueño en una realidad y Vero comenzó a vivir su ‘Boudoir Experience» con la misma intensidad de su propia personalidad.
Verónica es sensibilidad, es empatía, es vulnerabilidad, es poder…Vero es una niña libre con una sonrisa misteriosa cuyo trabajo la hace vivir de un modo apasionado. Veronica es Amor en mayúsculas, aquel que profesa a su marido, a su familia, a sus niñas, a los que la rodéan y la quieren y la respetan.
En cada nueva andadura voy aprendiendo tanto de la diversidad del ser humano como de su singularidad sorprendente. Cada mujer es tan única y a la vez todas somos la misma mujer en distintas etapas de nuestra vida.
Vero descifra misterios de la mente humana como quien entiende los secretos más recónditos del universo, esa es su gran capacidad, ese es el gran talento de esta extraordinaria mujer que un día decidió ‘desnudar’ su alma ante su propio espejo y ahora entiende que cualquier otra desnudez es tan solo un reflejo estético transitorio y como Vero es magia en estado puro, su deseo se hizo real. Y ahora sabe que cuando pasen los años y vuelva la mirada atrás, esta experiencia, estas imágenes le recordarán para siempre, la forma de su alma.
Ahora yo dejo de hablar para oir a Vero, ella es la protagonista y así lo ha vivido. GRACIAS por siempre: DIVINA VERO
MI EXPERIENCIA BOUDOIR
«El viaje comenzó de una forma inesperada pero sin duda, ansiada y deseada. Cuando recibí un regalo con la única premisa de disfrutarlo porque era algo solo para mí, supe que había comenzado una aventura mágica y donde aprendería mucho sobre la mujer que soy. Y que mejor guía que Irene Vélez, que al conocerla, supe que sacaría de mí una parte que nadie había conseguido ver.
Cada tramo que iba recorriendo en el camino, cada vez que más iba interiorizando en mi yo interior, en esa mujer sensual, en esa niña traviesa, esa persona segura de quien es y de lo que vale…cuando más iba abriendo esos cofres que llevaban cerrados muchos años en lo más profundo de mi ser, más me iba gustando ser yo, sentirme en mi piel, mas especial y única me sentía y eso sin duda, es una experiencia única que toda mujer debería experimentar. El encuentro con la fuerza, la energía, la inocencia, la sabiduría y por supuesto, la magia. Magia que me ha acompañado en todo este proceso por haberse hecho en un momento de mi vida muy especial donde además de la mujer que ya conocía, estaba en ciernes una que aún me queda por conocer y a la que estoy deseando descubrir.
El viaje fue como una aventura de piratas en la búsqueda de un tesoro, luchando contra mis fantasmas y atracando en viejos puertos donde había dejado amores importantes.
Y así fue como desplegué mis alas y deje que el viento me llevara sintiéndome libre, y notando como fluían esas mariposillas que me hacían preveer que el camino no había hecho más que comenzar….»
«Así fue como el día antes de la sesión me sentía como la mujer más especial del mundo, buscando la belleza en cada rincón de mi dormitorio, cosas que me hicieran ser más yo para que quedaran plasmadas en papel para siempre, hacer eterna la esencia de mi misma, mostrar lo que soy, desnudarme en alma y cuerpo ante mí, ese era mi mayor reto. Verme en el espejo tal y como era sin miedos ni complejos, queriéndome por lo que soy, no por lo que quería ser. Y estaba nerviosa por si esa imagen no me gustaba, si me daba vergüenza mostrar mi vulnerabilidad, mi sensualidad, mi sensibilidad…mostrarme tal cual sin más artificio que la luz y un attrezzo que sería una forma más de embellecer mi verdadero yo.
Ese miedo sin duda es el que nos acompaña muchas veces a las mujeres…el miedo a no ser lo que los demás esperan de nosotras, a no mostrar aquello que los demás esperan que muestre, miedo a defraudar, a sentirnos juzgadas…y ese día solo quería mostrarme a mí misma como el mayor ejercicio de humildad del mundo: honrarme como mujer, empoderarme y liberarme. Quica por eso…una de las cosas que elegí fueron unas alas……
Llego el gran día, el día donde me mostraría ante mí de una forma como nunca antes lo había hecho. Y el trato fue impecable, mujeres todas de bandera, sintiéndome aún más arropada.»
«Al empezar la sesión me podía aun la vergüenza, no me sentía capaz de transmitir belleza, me costaba creer que poseía una belleza única, como cada una de las mujeres del mundo, pero a medida que fue transcurriendo el día, fui entendiendo que solo dejándome llevar por las emociones, los sentimientos, las sensaciones…solo así liberaría a la mujer que quería mostrar. Sin saber aún que no solo tenía en mi la fuerza de una mujer, si no la de dos…Y foto tras foto fui abriéndome, disfrutando más y más de mi momento, con una guía única, Irene Vélez, que sabía cómo reflejar en mi la luz que veía , que me transmitía calma y serenidad, una maga que con cada disparo, me enviaba una energía que hasta ese momento, no había sentido. Me sentí la mujer más guapa, especial y única del mundo, un mundo que en ese momento se hacía un universo con cada disparo de la cámara, generando mil y una yoes diferentes. Durante ese día, fui magia.»
«La sensualidad es ese velo sutil que envuelve a la persona que se sabe única»
«La Magia se deslizo en el tiempo el día que vi mis fotos y me vi en ellas, en algunas inocente, en otras sensual y guerrera, mostrando todos esos pedacitos desmenuzados que ya empecé a atisbar en el viaje inicial. Ahí estaba el tesoro, cada una de esas fotos tenían luz, tenían libertad, sueños, esas imágenes me mostraban a mí de una manera en la que no pensé que sería capaz de verme. Me quede sin palabras. Y sin duda, solo pensaba que mereció la pena el viaje y que ojala todas las mujeres se permitieran alguna vez recorrer ese camino iniciático donde cambias la perspectiva de quien eres tú.
Ahora sé que soy capaz de transmitir luz, que soy una mujer única e irrepetible. Ese recuerdo me acompañara siempre, un recordatorio de que esa magia está dentro de mí, que esas alas que me hacen volar siempre están preparadas para desplegarse. Y que tengo suerte por haber encontrado en esta vida a alguien capaz de entender mi necesidad de libertad, que me de ese bastón cuando me flaquean las fuerzas, que sea mi compañero en el camino largo y extraño de la vida y que él haya sido el puente que hizo que conociera a una persona que con su cámara, saca la luz y la transmuta en arte, en belleza, en poesía. Una alquimista que saco la esencia de mi ser, la MAGIA, y que sin duda, no me queda más que decir que deseo volver alguna vez a encontrarme bajo el embrujo de una mujer maravillosa que te hace ser DIVINA Y UNICA.»
En el Hotel Argantonio: un lugar mágico, donde cada estancia es un deseo hecho realidad.
Gracias a Isabel, a Carmen y a Lourdes por su amabilidad y su trato exquisito.
Maquillaje y Peluquería: Alejandra Sánchez y Ana Ruiz
Estilistas de vestuario: Caridad Galán y Alejandra Díaz de Style Kokoro.
Gracias Antonio, su marido, por hacer este sueño realidad, por quererla como la quiere y desear que viviera esta experiencia única
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